- Autor
- Violeta Mayoral
- Fechas
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- Comisariado
- Martina Millà
Violeta Mayoral (Almería, 1988) creció en el desierto de Tabernas, un entorno rudo que educó su mirada. Por ese motivo, la artista conoce bien lo que significa vivir a la intemperie y sus ojos saben distinguir la peculiar naturaleza de un paisaje que fluctúa entre la ausencia y la búsqueda de unos límites que acoten, tal vez sólo como un intento, la inmensidad del espacio y del horizonte.
En esta selección de fotografías, la mayoría de las cuales son de temperatura fría, tomadas al atardecer o en momentos de baja luminosidad, encontramos aquellos elementos que tanto pueden abrir como cerrar un espacio o disolver sus límites y contornos. Mayoral fotografía lugares que podrían parecer hostiles, en los que el tiempo ha quedado suspendido, un tiempo que parece no existir y que el propio sitio no ayuda a situar o significar. Esta ausencia de referentes nos provoca extrañeza y no nos permite cogernos a ninguna parte. No hay situación ni significado. Al mismo tiempo, sin embargo, aparecen elementos que nos ayudan a acotar: el mar a modo de muro, una pared de vegetación, el impacto del flash sobre una superficie que la transforma en algo rígido.
A fin de cuentas, también hay un intento de encontrar un refugio entre tanta hostilidad a través de la belleza. Aunque el entorno sea desfavorable, inseguro, precario, la artista halla su manera de convertirlo en refugio. Y es que, tal vez, los obstáculos permiten generar un tiempo de reposo y contemplación en este estado de búsqueda incesante de una expectativa, de los resultados de una promesa que nos vamos pasando de generación en generación y que nunca acaba de cumplirse: la promesa como elemento exterior e ilusorio, y la mirada como umbral, ambas rodeando el sujeto, su interioridad, su soledad en la intemperie.